Dream City Projections
¿Quién decide poner La Habana, la Atlántida, Manila o Jamaica a un edificio de viviendas? ¿Qué imaginario hay detrás de esa decisión? Son lugares exóticos, que a veces nos remiten a destinos turísticos, lejanos, paradisíacos… pero ¿de dónde surge ese imaginario? ¿Qué imágenes tenía en la cabeza la persona que propuso ese nombre para el edificio? ¿De dónde venían esas imágenes, esas referencias? ¿Qué historia había detrás que las hacía tan potentes y atractivas que, sin haber visto seguramente ese lugar, se convirtieran en sinónimo de paraíso, de vacaciones perfectas, de sueño hecho realidad?
En las décadas de los 50 y 60, momento en que se construyeron la mayoría de estos edificios, coincidió con el auge de los grandes estudios cinematográficos como Hollywood o Cinecittà. En ese momento se popularizaron películas ambientadas en destinos exóticos que ofrecían una visión idealizada de esos paraísos terrenales. Películas de amor, acción y aventura se situaban en esos lugares fantásticos de los que nadie había oído hablar, ofreciendo una versión edulcorada y completamente imaginaria. “Atlántida, el continente perdido” (1961), “Affaire in La Habana” (1957), “Capri” (1960), “Maracaibo” (1958) son películas de historias fantásticas en lugares de ensueño.
A partir de la proyección de algunos fragmentos de estas películas sobre los edificios que llevan el mismo nombre, se crea esta superposición entre el sueño y la realidad, entre la inspiración inicial que hizo soñar a quien bautizó el edificio, y el resultado final que es hoy ese lugar. Las escenas épicas o románticas de la película se superponen con la cotidianidad de un edificio de viviendas en un pueblo costero. La discontinuidad entre realidad y fantasía, entre edificio y película, pone de manifiesto las fisuras de ese sueño, las imperfecciones del simulacro.
Vídeo HD / 7:37 min / 2023